Luis Grynwald, ex presidente de la AMIA y tesorero de la mutual al momento del ataque, habló con Infobae acerca de convivir con 20 años de impunidad, la relación de los distintos gobiernos con la investigación, y el polémico Memorándum con Irán. "Fue algo que nos llenó de indignación y tristeza", afirmó
-¿Qué reflexión le merece que se cumplan 20 años del atentado a la AMIA sin el juzgamiento de ninguno de los responsables?
Es algo lamentable, es mucho tiempo de impunidad. La justicia que llega tarde no es justicia, y tanto las 85 familias que perdieron a seres queridos como la sociedad argentina no han obtenido una respuesta. Es triste, pero es la realidad. De todas formas, seguiremos reclamando justicia y pidiendo que los autores intelectuales y los ejecutores del atentado estén donde tienen que estar, que es tras las rejas.
-¿Cómo se llega a 20 años de impunidad?
Es una pregunta compleja. La que tiene que dar la respuesta es la Justicia. Nosotros, como miembros de la comunidad judía, esperamos que las autoridades investiguen y determinen quiénes son los responsables. Solo podemos acompañar desde nuestro lugar. Pero resulta muy penoso, después de tanto tiempo, seguir sin saber casi nada, o saber muy poco de lo que ocurrió. Pero tenemos la certeza de que la República Islámica de Irán planeó y ejecutó el ataque.
-¿Dónde estaba usted en el momento del atentado?
Estaba en un bar de la esquina de las calles Larrea y Tucumán. En ese momento yo era tesorero de la AMIA, y esa mañana estaba haciendo tiempo, tomando un café, esperando que se hagan las diez y media para ir a la firma de un acuerdo con una empresa que nos estaba haciendo la remodelación del segundo y cuarto piso. De repente, escuché una explosión, un ruido muy fuerte que hizo que volaran todos los vidrios del bar.
-¿Cuál fue su primera reacción?
Mi primera reacción fue pensar que se trataba de un choque muy fuerte de colectivos. Muy iluso de mi parte. Cuando salgo a la calle y veo la polvareda y el humo que venían desde Pasteur, tomé concienca de la magnitud de lo que había pasado. A los segundos, salí corriendo hasta ahí.
-¿Como analiza el comportamiento de las distintos gobiernos con respecto a la
inviestigacion por el atentado?
Hasta la asunción de Néstor Kirhcner, hubo un parate total a nivel gubernamental. Recién a partir de su gobierno hubo un impulso a la causa, a nivel local e internacional, ya que el presidente Kirchner fue a las Naciones Unidas y le pidió a Irán delante de todo el mundo que colabore con la Justicia. Pero antes de eso, no hubo ningún tipo de avance. También se creó la Fiscalía espacial durante esos años, algo muy importante.
-¿Lo sorprendió la firma del Memorándum entre el Gobierno Nacional y el régimen iraní?
Me sorprendió igual que a todo el mundo, y no lo entendí. Es hasta el día de hoy que no se comprende por qué rubricó ese acuerdo. Si realmente hubiese conseguido resultados, no tendría problama en decir "me equivoqué, pensamos una cosa pero sucedió otra". Sin embargo, el tiempo nos ha dado la razón. No hubo ningún acercamiento, ninguna colaboración, con el agravante de que personas que están sospechadas de haber sido las ejecutoras del atentado, miembros del gobierno iraní, han estado en Bolivia, en países limítrofes, e Interpol no las detuvo. Es algo que nos llena de indignación, de tristeza.
-¿Y usted tiene alguna hipótesis personal de por qué el gobierno dio ese giro y pactó con Irán?
No, la verdad que no. Desde el gobierno siempre han dicho que se hizo desde el afán de conseguir justicia, que se hacía con buena fe. La realidad es que con los terroristas no se negocia, ni acá ni en ninguna parte del mundo. A los terroristas se los combate. Pero ninguno de nosotros está en el Poder Ejecutivo como para saber a ciencia cierta qué sucedio.
-Mañana (por hoy) se va a conmemorar el atentado con tres actos separados. ¿Qué le produce esa fractura entre la AMIA y la DAIA y las organizaciones de familiares de víctimas?
En realidad, todos queremos lo mismo, todos queremos justicia. Cada uno ha elegido un camino diferente hacia la búsqueda de esa meta final, que es saber la verdad de lo que pasó. Me parece que es válido que esto sea expresado de diferentes maneras, con distintas formas de pensar. Y mi deseo es que la sociedad argentina acompañe a los familiares, en esta fecha y en el resto de los días del año.
-¿Usted cree que finalmente se va a saber quiénes los autores y que serán juzgados?
Sí, creo que va a haber justicia. Hay que recordar que casi 70 años después de la Segunda Guerra Mundial, todavía el mundo occidental libre sigue encontrando criminales de guerra nazi, los sigue enjuiciando. El caso de Priebke en Argentina, por ejemplo. Acá, después de cuarenta años, las Madres y Abuelas siguen encontrando y recuperando nietos. Nosotros como comunidad judía tenemos 5700 años de historia en los que hemos aprendido de todo. No vamos a claudicar ni un minuto en saber de verdad después de 20 años. En algún momento, la Justicia argentina, la sociedad, va a saber realmente quiénes fueron los autores materiales e intelectuales, y el brazo ejecutor de este atentado. Nadie va a bajar la guardia.