Así expresó el presidente israelí en su discurso en el Vaticano en el marco del acto interreligioso impulsado por el Papa Francisco, dos semanas atrás en su visita por Israel y la Autoridad Palestina. "Este momento emocionante, lleno de esperanza y de fe, nos lleva a todos junto con usted a pedir por la paz entre las religiones, entre las naciones, entre las comunidades y entre los pueblos israelí y palestino, que sufren la ausencia de paz”.
El presidente israelí Shimon Peres y su homólogo palestino Mahmoud Abbas, llegaron esta tarde, domingo, al Vaticano para participar en el evento especial interreligioso para pedir por la paz, impulsado por el Papa Francisco durante su reciente visita a Tierra Santa, dos semanas atrás.
Los rabinos leyeron Versículos de Paz de la Tanaj, los cristianos hicieron lo propio del Nuevo Testamento y los musulmanes leyeron los versículos de la paz del Corán. Tras las lecturas, el Papa Francisco leyó con Peres y Abbas versículos seleccionados para la ocasión los cuales simbolizan el deseo de paz.
Contrariamente a los reportes de los medios de prensa internacionales que aseguraban que el viaje de Abbas y Peres al Vaticano pretendía, entre otras cosas, restablecer las negociaciones entre Israel y los palestinos, el portavoz de Abbas, Nabil Abu Rudeineh negó rotundamente los reportes y dijo que "siempre y cuando Israel anuncie la construcción de miles de unidades de vivienda más allá de la Línea Verde en Jerusalem y continúe imponiendo sanciones contra los palestinos, no hay ninguna posibilidad de que se renueven las negociaciones ". Abu Rudeineh también dijo que "Ramallah prepara medidas sin precedentes en contra de Israel”.
En su discurso pronunciado, el presidente israelí, Shimon Peres, citó los Salmos Salmos "Pedid por la paz de Jerusalem”.
Peres se dirigió al sumo Pontífice y dijo: "Este momento emocionante, lleno de esperanza y de fe, nos lleva a todos junto con usted a pedir por la paz entre las religiones, entre las naciones, entre las comunidades y entre los pueblos israelí y palestino, que sufren la ausencia de paz”.
“Las lágrimas de las madres por sus hijos aún es desgarrador. Debemos poner fin al dolor, la violencia y el conflicto. Todos necesitamos la paz. La paz entre iguales. La Biblia nos guía a la senda de la paz. Incluso si se trata de concesiones y compromisos. Los palestinos son nuestros vecinos. Oramos para que pronto podamos vivir en el respeto mutuo y la buena vecindad".
