El 24 de abril se cumplió el 95 aniversario del Genocidio Armenio, crimen de lesa humanidad sufrido por el pueblo armenio. Turquía sigue sin reconocer la masacre cometida entre 1915 y 1923, donde murieron 1.500.000 y fueron deportados más de 750.000 armenios.
Los descendientes de aquel crimen, una de las mayores tragedias de la Humanidad, luchan por el reconocimiento internacional de ese genocidio.
Como integrantes de la comunidad judía tenemos la obligación de reflexionar, además, sobre el posible curso de la historia posterior, que incluye el Holocausto, de haberse reconocido, perseguido y castigado los horribles crímenes contra la población armenia.
Pero no solo debemos rememorar el pasado, hoy la intolerancia de la nueva etapa que vive Turquía, en la que las minorías en general, y especialmente la armenia, son discriminadas debe hacernos levantar la voz para evitar peores males futuros. El alineamiento del actual gobierno turco hacia el gobierno dictatorial de Irán, su actitud antisraelí y la discriminación a las minorías que viven en su territorio son distintas facetas de una misma y repudiable actitud.
Nuestra solidaridad con la comunidad armenia en su justa lucha!