El martes 21 de septiembre Plural JAI | Judaísmo Amplio Innovador organizó la Mesa Redonda "La mujer en los espacios de decisión comunitaria", en el Auditorio de la Universidad Maimónides, cedido gentilamente para esta ocasión.
El encuentro estuvo moderado por Leonardo Feiguin, quien hizo una breve introducción en la que mencionó que el tema convocante es un tema del que Plural JAI se ocupa, y que mereció tomarse en cuenta para organizar un evento de estas características.
Reflexionó, ante un auditorio colmado y entusiasta, que “la discriminación de género, responde a un prejuicio, que es una creencia que cuando se convierte en conducta pasa a ser discriminación”. A modo de ejemplo, sitó un hecho aparecido ese mismo día en el Mensuario Identidad de Uruguay, escrito por Perla Marchewka, quien hace referencia a este pensamiento retrógrado y machista, finalizandp el artículo con recetas de cocina.
También mencionó que de todos los colectivos discriminados, el único que no es minoría es el de género, en virtud de que las mujeres son el 52% de la población mundial.
La introducción del Esc. Feiguin, miembro de Plural JAI, dio pie a la presentación de las panelistas, dejando constancia que la silla vacía en el panel se debía a la decisión de la Sra. Shterna Grunblatt de no participar del debate, a pesar de haber confirmado su presencia.
Audio completo de la Mesa Redonda
De esta manera, en un clima de atención, reflexión y desacartonamiento comenzaron las exposiciones de cada una de las panelistas, ocupando el primer lugar la Dra. Mirta Goldstein, Presidente de la Asociación Amigos de la Universidad de Haifa.
La Dra. Goldstein hizo referencia a las concepciones éticas no judías de Derecho que entraron en el Judaísmo y hoy son consideradas como judías. Aunque el acervo cultural dice que el judaísmo es quien influyó en la cultura occidental, poco se habla de la influencia de la cultura (tanto romana, como germánica), en la cultura judía.
”...Muchas son las aristas desde las que se puede analizar el lugar de la mujer: inclusión, exclusión, discriminación, familias disfuncionales, violencia familiar y las consecuencias en los hijos...”
"Esto obviamente, en su versión de familias observantes y en familias no-observantes.
¿Desde que ética consideramos a la mujer observante y a quienes ejercen su observancia de otras maneras?
¿Quien es que asume la potestad de la mujer ante el lazo social?"
¿Es preciso, aun hoy, un aval de participación para la mujer? ¿Es este un tema aun vigente?
Reflexiona: ”... la Torá no discrimina a la Mujer...”
Según la Dra. Goldstein, este es un aspecto “importado” de otras culturas y que se enraizó en la cultura judía. Incorporado gracias a las diásporas, se hizo carne, y devino en que siendo el género masculino quien interpreta, así fue incorporado. Se comunica que es “verdadero Judaísmo”, cuando en realidad no es así. Genera una cultura que no responde a la ética judía.
La halajá es interpretación abierta y HUMANA, esto es lo que produjo años de exégesis, y de muchas vertientes de opiniones, muchas veces contrapuestas. Si es humana, es modificable y transformable.
La Dra. Goldstein hizo una categorización de las diversas instituciones que, a su juicio, componen nuestra comunidad y en ellas, cuál es el grado de participación femenina.
Advirtió que se dará un paso adelante cuando toda aquella mujer que esté a la altura de la preparación necesaria, equiparable a la de cualquier askan (voluntario) varón, pueda acceder con voz y voto a cualquier cargo de instituciones centrales comunitarias.
A continuación, hizo uso de la palabra la Rab. Silvina Chemen, e hizo referencia al concepto de “desdibujamiento del género”.
Comentó que su punto de vista e ideología, parte de la pluralidad y que justamente para ella, este encuentro avizoraba esa perspectiva.
Solo que la ausencia de Shterna Grunblat en el debate le producía frustración, ya que una vez más tenía que explicar su alegría de ser lo que es. Y contó que llegó a ser Rabino, porque en su militancia y participación efectiva comunitaria, es reconocida por los “otros”, quienes ven que su aporte es nutriente, apoyo, y sostén. A partir de las múltiples devoluciones que recibe en su constante devenir comunitario, no siente que tenga que pedir permiso para estar, ni compartir, ni permanecer con y entre otros.
Una silla vacía, es vacío de respeto. Luchamos contra el antisemitismo, pero entre nosotros mismos generamos la diferencia. "Se define quien es trucho y quien no lo es…" "...Es una LEY IGUAL, con diferentes interpretaciones que devienen en diversas prácticas. Eso es JUDAISMO..."
Los videos han sido eliminados a pedido de la oradora
En cuanto a como insertarse en la Comunidad, sugirió que: ”...hay que hacerlo desde la femineidad que nos constituye, y tenemos nuestros métodos, que seguramente no son los que abordan los varones, no hay que tratar de imitarlos, sino, incluirnos desde nuestras modalidades..."
”...Cuando comencé en Bet EL, el Rab. Daniel Goldman me dijo dos frases: No quiero que hagas lo que yo no quiero hacer…y Que seas quien toma los desperdicios de mi tarea…" "Tampoco quiero que seas el Rabino de las mujeres…sos Rabino de la Comunidad..."
Para cerrar la primera ronda de participaciones, fue el turno de la Profesora Amalia Polak, Presidente de la WIZO (Organización Internacional de Mujeres Sionistas) de Argentina. La Profesora Polack eligió remitirse a la consigna de la actividad.
Hizo referencia a que por la envergadura de lo acaecido en la AMIA en el año 1994, esta institución tomó notoriedad, pero que comunitariamente debemos saber, que es importante conocer que la participación en las otras instancias centrales es tanto igual de importante por lo que representan y lo caro a los sentimientos que son tanto como argentinos y judíos.
Lacónicamente arguyó que las mujeres padecen del síntoma de “exclusión”.
”...Son "colocadas" en cargos, cuando es absolutamente necesario..."
Se prefiere atribuir que el aporte de las señoras es para “armar las comidas”, “definir que se hará con los chicos en un evento”, mientras los Señores, hacen sus discursos que ya tienen crónica previa.
”...Yo les digo a las directivas del Interior: No sean las peonas de la comunidad..."
"¿Quienes tienen la responsabilidad de esto?", se preguntó Amalia.
Y se respondió que las mismas mujeres, quienes se acomodaron a culturas y modalidades circundantes, de gran influencia hispana oscurantista.
Propuso que se haga una modificación de los Estatutos de las Instituciones centrales: AMIA, DAIA, OSA. Para ello, se requiere que las mujeres deben conocer de que se trata cada institución, y saber que harán POLITICA, y que pueden hacerlo.
Y en esa línea, también deslizó que desde la dirigencia comunitaria, hay que ser muy lúcido y no encandilarse con las luces de flashes, ni de salones, y que hay que ser cauto en decidir cuando y donde estar, ya que el Poder, después de dar, siempre pide a cambio.
Hizo referencia a que comunitariamente hay poca cultura cívica. Hay que acostumbrarse a generar elecciones e internas comunitarias a fin de democratizar a nuestra comunidad.
Una vez finalizada la rueda inicial de exposiciones, el público presente partició activamente, generando múltiples preguntas y reflexiones que permitieron ampliar las consideraciones iniciales y producir el debate sobre las cuestiones presentadas.
Para finalizar, el moderador invitó a todos los presentes a participar activamente en las distintas instancias comunitarias, lo que es fundamental para producir los cambios necesarios que permitan eliminar la exclusión desde todo punto de vista.
Lic. Nora Tage Muler
Coordinadora Plural JAI
Fotos y Videos: David Salischiker