El 14 de Junio del 2018 comienza en el Estadio Luzhniki de Moscú en Rusia con la presencia del Presidente Vladimir Putin. El encuentro y fiesta más prestigiosa del mundo, la FIFA World Cup 2018. Mientras que los políticos y deportistas Rusos sienten sus deseos colmados de satisfacción por este logro nacional al ser los anfitriones de semejante espectáculo. Para las agencias y organismos de seguridad rusos esto solo representa un gran dolor de cabeza y una fuente de preocupación.
No son solo por las imágenes aparecidas en las redes sociales donde el gran talentoso jugador Messi y Ronaldo están siendo degollados por un combatiente del Estado Islámico como símbolo del mensaje que el grupo quiere transmitir durante la Copa del Mundo. Sino porque Rusia desde el año 2015 viene participando de la guerra civil en Siria no solo proporcionando suministros militares. Atacando ciudades y territorios controlados por los rebeldes islámicos en un conflicto que ya costó la vida de medio millón de personas y millones de desplazados. Es que con esta intervención Rusia se ha convertido en un enemigo primario del terrorismo islámico. Las grandes ofensivas de Alepo y Palmira, la destrucción completa de pueblos como Abu Kamal en la frontera con Irak. Y el rol central de Rusia en la reciente destrucción del enclave de Goutha del Este y del campo de refugiados palestino de Yarmuk en Damasco entre otros han hecho que el Califato le declare la guerra a Rusia.
Los servicios de seguridad del estado tienen bien presente las continuas amenazas lanzadas contra Putin amenazando con incendiar el país. Como por ejemplo las transmitidas por el canal Al Arabiya TV en 2015 o las de Al Masdar News de Siria en 2014. En donde los combatientes islámicos le aseguraban que Rusia seria bombardeada de la misma forma cómo ellos eran atacados. Además de la firma conjunta por parte de 41 grupos integristas islámicos en Septiembre del 2015 de una declaración de que la guerra contra Rusia no se limitaba al suelo Sirio. Y de publicidades terroristas en donde describen a los rusos en todas ellas, como los Cruzados del Este que deben ser castigados en Moscú. Acompañado todo esto por el incremento de actividad por internet durante los últimos seis meses donde los posteos de propaganda del Estado Islámico vienen amenazando el desarrollo de la Copa Mundial. Acompañados por llamamientos a cometer ataques suicidas difundidos a través de internet, por la agencia Islámica Wafa M.F. o por la agencia Al-Nur Media Center que transmite sus mensajes en francés que juntos a mensajes interceptados por Telegram llaman a atacantes solitarios a convertirse en mártires.
Es por esto que la preocupación principal de los organismos de seguridad está dada como lo describe el CSIS (Centro para Estudios Estratégicos) de Washington. Y el Centro de Combate al Terrorismo en la Escuela Militar de West Point, Estados Unidos. Principalmente en los estimados 8500 combatientes islámicos de origen rusos de sus provincias musulmanas del sur y centro como por ejemplo Daguestán, Chechenia y Tartaristán. Que recibieron el llamado del Islam y se enrolaron en ISIS para combatir en Siria. Y en donde vieron morir a sus compañeros y a sus familiares que los acompañaron en su aventura, bajo los misiles y bombas rusas. Y que a medida que las pérdidas territoriales se acentuaban provocando la derrota como estado de ISIS, los obligaba a retornar a sus provincias sedientos de venganza imbuidos del espíritu de la jihad. Y también debido al grupo terrorista autóctono musulmán que pretende establecer un Califato en el Cáucaso. El movimiento Kavkaz Velayet (Provincia) de Daguestán afiliado a ISIS y que viene combatiendo a las fuerzas de la Republica desde hace varios años. Acompañado por el hecho que el torneo se desarrollará por casi un mes en 11 ciudades diferentes donde muchas de ellas no tienen sistemas de comunicaciones totalmente seguras lo que dificulta en muchos casos las tareas de coordinación logística y prevención. Todo esto hace a la preocupación tanto de las agencias de seguridad rusas como a las internacionales.
Aunque es cierto que las Fuerzas de Seguridad Federal (FSB) que reemplazaron a la antigua KGB junto a las fuerzas del (MVD) Ministerio del Interior. Vienen trabajando eficientemente desmantelando células islámicas en varias regiones de la Federación. Como durante la Copa de Confederaciones del año 2017 en las que las fuerzas de seguridad desarticularon un ataque islámico terrorista que pretendía hacer chocar dos trenes de alta velocidad entre Moscú y San Petersburgo. O como ocurrió en Marzo 12 del 2018 donde unidades militares eliminaron en una autopista en la ciudad de Sarátov a un grupo armado. O en Abril 17 del 2018 donde también en la Ciudad de Rostov en un enfrentamiento militar eliminaron a un grupo armado islámico. Y es que además de estos ejemplos el número de operaciones y arrestos relacionados con actividades terroristas islámicas se ha multiplicado en una forma preocupante durante este último año. Llegando a las 190 detenciones, 15 muertes en enfrentamientos y la desarticulación de 12 células terroristas. Todo este incremento en la actividad terrorista ha causado preocupación entre las fuerzas de seguridad y ha conducido al incremento de las actividades de control en las regiones más volátiles del país. Entre ellas las que se encuentran las ciudades sedes de partidos de la Copa Mundial cercanas al territorio de influencia del grupo islámico Kavkaz Velayet como Volgogrado, Stávropol y particularmente la Ciudad de Sochi. La cual es considerada la capital sagrada y martirizada del grupo étnico musulmán Circasiano que fuera prácticamente aniquilado por Rusia en el siglo XIX y por considerar los grupos islámicos un sacrilegio la realización de un torneo de este tipo en aquella ciudad.
Es así que para prevenir y dar seguridad en todas las sedes mundialistas y en los lugares de entrenamiento y concentración durante el evento. Las fuerzas de seguridad rusas han preparado una serie de medidas extremas que incluyen entre otras operaciones:
1-La prohibición total de hacer volar drones, globos aerostáticos y pancartas entre otras, en las proximidades de lugares sensibles.
2-Creacion de zonas de acceso restringido y prohibido.
3-Acreeditacion con Documentos de cada persona que ingrese al estadio y Tickets de entrada personalizados.
4-Prohibicion total a la venta de artículos de uso restringido.
5-Cierre compulsivo de ciertas fábricas que produzcan elementos peligrosos en las ciudades sede.
6-Prohibicion de movimiento naval en las proximidades de los estadios.
7-Cierre de carreteras, y disposición extra de seguridad y agentes en aviones y trenes que transporten equipos de competición.
8-Instalacion de tecnologías de reconocimiento facial que incluyen 5000 cámaras de seguridad para cruzar información online a lo largo de Moscú.
9-Puesta en alerta de todo el sistema de seguridad del Comité Anti-terrorista. Con la disposición de 30000 agentes extras.
Esperamos que los preparativos dispuestos, como así el constante accionar preventivo de sus fuerzas de seguridad. Acompañada del trabajo conjunto con otras agencias internacionales y la buena fortuna. Sean lo suficiente efectivas para asegurarnos un torneo lleno de alegría y felicidad.
