A más de 24 hs de concluido el escrutinio de las elecciones de la AMIA efectuadas el domingo 10 de abril es necesario explicarles a muchos miembros de la comunidad que no están integrados al devenir político interno de la institución lo ocurrido y lo que puede llegar a pasar desde ahora hasta el 12 de mayo, aproximadamente a las 20 hs. cuando sesione la Asamblea Electora que debe elegir a los dirigentes que conformarán la próxima Comisión Directiva.
Para hacerlo existen varias opciones, pero quizás la más conveniente sea plantearse un interrogante: ¿Cómo se lo explico a la Bobe o a la tía Sara que fueron a votar porque el nieto se los pidió?
Lo primero que habría que explicarles es que lo que se votó es la manera en que se integrará la Asamblea de Representantes de Socios, que la conforman 90 dirigentes, distribuidos en forma proporcional en base a los votos que cada lista electoral obtuvo, en este caso el Bloque Unido Religioso 37, Acción Plural 32, el Frente Comunitario 18 y Iajad 3.
Después los representantes de socios elegirán entre los 90 miembros de la Asamblea a quienes integraran la Comisión Directiva, incluido el presidente, y los revisores de cuentas.
También que esa asamblea, la primera conformada por los representantes electos el domingo pasado, se denomina electora, porque tiene que elegir a los miembros de la Comisión Directiva y a los revisores de cuentas, y que ya está establecida la fecha para la que fue convocada: el 12 de mayo a las 19 hs.
Otro aspecto que se debe explicar es que los que resulten electos ese día, el 12 de mayo, han de asumir sus cargos el día 31 de mayo al anochecer en un acto que se realizará en el salón auditorio del edificio de Pasteur 633.
Una vez que la Bobe y la tía Sara, hayan comprendido lo que les hemos explicado, debemos pasar a hacerlo con el aspecto estatutario: cómo los miembros de la Asamblea Electora eligen a quiénes integrarán la Comisión Directiva.
El artículo 24 del estatuto vigente establece que se elegirán a los miembros de la Comisión Directiva por medio de listas que deben ser presentadas con anterioridad a la presidencia de la asamblea, que la ejerce el presidente de la AMIA. Allí, cada uno de los candidatos deberá aceptar por escrito la conformidad a ser votados y los representantes deberán votar en forma nominal. Es necesario para ser designada que la lista obtenga como mínimo el voto del 60% del total de los representantes, es decir el de 54 representantes. Si esto no ocurre se pasará a una segunda y, eventualmente, una tercera votación. Si en ninguna de éstas se llega al 60% de los votos, se deberá hacer una cuarta elección donde solo participarán las dos listas que hayan obtenido la mayor cantidad de votos, resolviéndose la designación de los integrantes de la Comisión Directiva por simple mayoría, es decir el voto de 46 representantes de socios. Como el mismo artículo establece que no se podrá hacer más que una elección por día, se deberá pasar a cuarto intermedio hasta el día siguiente, sin contarse las fiestas nacionales o festividades judías religiosas intermedias.
Si bien no recordamos que este engorroso procedimiento se haya utilizado en los últimos 30 ó 40 años, es bueno conocerlo por dos motivos, el primero es que en la elección del 10 de abril ninguna de las listas participantes obtuvo la mayoría absoluta de representantes de socios y segundo que ,a diferencia de otras elecciones donde ocurrió lo mismo, en esta oportunidad hay declaraciones de algunos referentes de las listas que salieron segunda y tercera, Acción Plural y el Frente Comunitario, de que no les entregarán los votos al Bloque Unido Religioso, por lo que puede llegar a producirse la situación que el 12 de mayo se presenten dos listas para integrar la Comisión Directiva de la AMIA.
Después de todas estas explicaciones, seguramente la Bobe y la tía Sara querrán saber que pasará hasta el 12 de mayo y sólo le podremos contestar que los referentes de las listas han de mantener negociaciones entre ellos con la finalidad de constituir una sola lista de candidatos a la Comisión Directiva. También debemos aclararles que no serán nada fáciles, y que las definitorias recién tendrán lugar luego de la festividad de Pesaj y quizás todavía más adelante en el tiempo.
No debemos olvidarnos que hace tres años, la noche en que se celebraba Iom Haatzmaut, se los vio conversar muy animadamente a Tomy Saieg, prosecretario primero de la AMIA, y al rabino Sergio Bergman. También hay que recordar cuando la lista de la cual Bergman era el indiscutido referente apoyó a los ortodoxos para que sus dirigentes ocuparan la presidencia, la vicepresidencia primera y la tesorería, el comentario generalizado fue que en esa reunión se había arribado al acuerdo.
Seguramente a la Bobe le habrá llamado la atención que la Presidenta de la Nación, Cristina Fernández de Kirchner, haya felicitado al presidente de la AMIA, Guillermo Borger, por la elección. Debemos agregar que no se recuerda que una situación similar se haya producido con anterioridad. Pero más sorprendió que un comunicado de la AMIA incluyera la siguiente frase “Por último desde el Bloque Unido Religioso, celebraron y apoyaron enfáticamente la manifestación de Luis Grynwald de la lista Acción Plural, quien dijo que "en la historia de la entidad, siempre la primera minoría se queda con la presidencia” y señalaron también que históricamente AMIA ha cumplido con este mandato posibilitando en todos los casos que la fuerza triunfadora acceda a encabezar la entidad judía”.
Si bien es cierto que tradicionalmente cuando ninguna lista electoral obtenía la mitad más uno de los votos válidos emitidos, la presidencia le correspondía a la primera minoría, no es lo que se escuchó cuando finalizaba el escrutinio ni lo que declaró José Adaszko a AJN/Itón Gadol.
Mientras concluía el escrutinio y se comentaban los resultados, un dirigente de Avodá afirmaba que ellos nunca le darán sus votos en la asamblea a la ortodoxia, mientras que otro decía que no era momento para tomar decisiones sino para esperar a ver qué ocurría en las negociaciones.
Por otro lado, un dirigente cercano a Isaac Ursztein, a quien se consultó en la mañana del lunes, explicó que Ursztein se tomaba unos días de descanso, hasta la finalización de Pesaj y que no atendería el celular. Identica situación ocurre con los ortodoxos que durante la fiestas judías interrumpen toda su actividad.
Mientras que Ángel Barman afirmó, en base a las difundidas declaraciones de Luis Grynwald, que será el nuevo presidente de la AMIA, José Adaszko sostuvo “ese no es el sentir general del movimiento”, para luego expresar que “cada sector realizará las acciones y tratará de formar gobierno”, y agregó que “hay grandes coincidencias con la lista 2, la que salió tercera”
Que a poco más de 24 hs de cerrado el escrutinio haya opiniones tan encontradas también llama la atención, porque lo lógico sería que cada sector se tome un tiempo prudencial antes de que sus referentes salgan a hacer declaraciones, en especial cuando para alcanzar los 54 votos nominales en la Asamblea Electora es necesario lograr apoyos que solo surgirán de acuerdos que se lograrán luego de largas y arduas negociaciones donde no sólo habrá que definir quién ocupara la presidencia de la AMIA, sino también cada uno del resto de los cargos que integran la Comisión Directiva.
Seguramente cuando se intenta explicar el por qué de esas arduas y difíciles negociaciones, la Bobe y la tía Sara ya se habrán dormido de aburrimiento.