En las primeras horas de enterados, altos dirigentes de la comunidad judía apenas masticaron la bronca que expresaron a Clarín . Entre la multitud que acompañaba a Cristina Kirchner durante la puesta en marcha, la semana pasada, de un Instituto de Investigación Tecnológico, de la Terminal de Omnibus y de la Planta de Tratamiento de Líquidos Cloacales, en Miramar, sobresalían el presidente de la Asociación Mutual Israelita Argentina (AMIA), Guillermo Borger y Sergio Burnstein , miembro este último de la Asociación de Familiares de las Víctimas del atentado contra la mutual, y un habitué de las actividades de la Casa Rosada.
Anoche, no faltaron los que también criticaron la invitación del canciller Héctor Timerman a la dirigencia de AMIA para que lo acompañe a su viaje a Israel, el 4 y 5 de abril. Algunos en campaña para los inminentes comicios en AMIA (ver aparte), varios dirigentes optaron por resguardar sus nombres de las críticas. Pero fuentes de la Delegación de Asociaciones Israelitas Argentina cuestionaron duramente los fluidos vínculos de la dirigencia de AMIA con el oficialismo . Y también a la prensa porque, señalaron, “la voz política de la colectividad judía en el país es la DAIA y no AMIA” dijeron. Ambas instituciones mantienen una evidente rivalidad. “Desde el atentado de 1994, convirtieron a la AMIA en la voz de la colectividad. Pero se trata de una institución más entre las 150 representadas en DAIA, señaló la fuente.
Incluso dentro de la misma dirigencia de AMIA, hoy a manos de los ortodoxos del Bloque Unido Religioso, hay otras corrientes identificadas con el rabino Sergio Bergman que cuestionan duramente el acercamiento fluido al Gobierno, que desde la Secretaría de Comercio Interior que dirige Guillermo Moreno contempló medidas más que favorables para la economía kosher, que fomenta la ortodoxia de la mutual. Ayer Borger estuvo con el jefe de Gobierno Mauricio Macri.
Clarín consultó diversas instituciones de la colectividad, entre ellas escuelas y varios clubes sociodeportivos.
Las respuestas fueron diversas. Bajo condición de anonimato, hay quienes dijeron, con suspicacia, que veían mal que una administración de turno de la mutual se vinculara a actos de gobierno que nada tuvieran que ver con la institución. Otros prefirieron no opinar porque “bastante dividida está la colectividad”.
Consultada por Clarín una fuente de AMIA explicó que Borger como Burstein y otros tres miembros de Familiares llegaron a Miramar invitados por el intendente de la ciudad, el kirchnerista Patricio Hogan, que revirtió a su favor un incidente desconocido.
Por los históricos vínculos del balneario con la colectividad judía, en el último tiempo la ortodoxia judía fue sembrando allí también su reducto de veraneo. Recientemente, se le incautó en la ruta un cargamento kosher a un hombre que llevaba su alimento para su numerosa familia. Contó la fuente que el propio Hogan se disculpó e invitó a la AMIA para un homenaje a las víctimas del atentando, justo para cuando llegara Cristina.
El 10 de abril hay internas
El 10 de abril habrá elecciones en AMIA, dirigida desde 2008 por el Bloque Unido Religioso, que el sector ortodoxo de la colectividad, y a decir verdad, el más unido.
Tan unido que, reconocen en la comunidad, “si los laicos no se unen o la colectividad en pleno no sale a votar, el Bloque, será reelecto. Entre los candidatos para la presidencia por los ortodoxos figura el nombre de Angel Barman. Entre los laicos, quienes más probabilidades tiene y ya blanqueó sus deseos figura Luis Grynwald, de Plural Jai. Grynwald ya fue presidente de AMIA y ahora se presenta con un conjunto de agrupaciones bajo Acción Plural. Según informó Iton Gadol, el otro candidato es Isaac Urztein, del Frente Comunitario, entre el que está AMIA es de Todos, del rabino Bergman.
Antecedentes
La Embajada de EE.UU. en Buenos Aires advirtió a su país en 2008 que el pedido de detención contra el ex presidente Carlos Menem y el ex juez Juan José Galeano por el caso AMIA fue, en realidad, una maniobra oficial y del fiscal Alberto Nisman para frenar la imagen negativa de Cristina.
En un cable firmado el 22 de mayo del 2008 por el ex embajador Earl Anthony Wayne difundido por Wikileaks advirtió que “probablemente” Nisman “usó políticamente” los tiempos del anuncio del caso para favorecer al gobierno de Cristina”.
