"OTRO ENTRE OTROS" Y EL DRAMA DE LOS GAYS DENTRO DE LA COMUNIDAD JUDIA

Posteado el Mié, 18/08/2010 - 13:50
Autor
Paulo Pécora
Fuente
TELAM

 

Buenos Aires, 18 de agosto (Télam, por Paulo Pécora).- "Otro entre otros" es un valioso documental de Maximiliano Pelosi que se estrenará mañana y que aborda el profundo drama de los homosexuales dentro de la comunidad judía en la Argentina, la mayor de Latinoamérica, en la que durante muchos años fueron discriminados y segregados a causa de fuertes prejuicios y motivos religiosos.

Se trata de un testimonio indispensable para comprender mejor el trauma vivido por muchísimos de los casi 15.000 gays que representan entre el 6 y el 8 por ciento de los 250.000 judíos que viven en el país, y para apreciar el grado de "valentía" -según Pelosi- de los cuatro protagonistas que desnudan su intimidad frente a cámara.

La enorme y triste ironía que revela "Otro entre otros" es que los gays judíos se sienten discriminados y despreciados por ser diferentes, justamente dentro de una comunidad que fue perseguida durante siglos -y actualmente todavía lo es en muchos lugares- por prejuicios y temores racistas.

"Ojalá que esta película sea una bisagra dentro de la comunidad y se puedan generar algunos cambios. Es muy triste que la comunidad judía piense en las diferencias como un punto de separación y no como un punto de unión", afirmó Pelosi, quien debuta aquí como director luego de producir filmes sobre la diversidad como "Lesbianas de Buenos Aires" y "Un año sin amor".

En una entrevista con Télam, Pelosi -cuyo novio también es judío- recordó que decidió hacer esta película debido a que le parecía triste que su propia suegra no sepa ni se entere que su hijo está enamorado y convive desde hace tiempo con él, y porque le parece "muy injusto que ella y muchas otras personas ignoren y se pierdan las cosas que viven sus hijos".

Para abordar el tema, Pelosi entrevista a cuatro judíos gays que aceptan contar sus experiencias frente a cámara, entre los cuales está Gustavo, cuyos abuelos llegaron al país desde Siria, y quien afirma que "los judíos piensan que no hay judíos ladrones ni pobres y mucho menos judíos gays".

La negación de la realidad y de la existencia de homosexuales dentro de la comunidad judía local es uno de los ejes centrales de la película, que se hace evidente en la reacción negativa de los padres de Daniel -otro de los protagonistas- que no hablan del tema, hacen de cuenta que no conocen su inclinación sexual y ni siquiera pueden verbalizar la palabra gay.

Otro de los entrevistados recuerda su despertar sexual y la traumática "salida del armario" que sufrió al decirles la verdad sobre su homosexualidad a sus padres y amigos, ya que ellos recibieron la noticia con mucho rechazo, e incluso uno de sus compañeros -que también aceptó ser entrevistado- sintió que "se había muerto un amigo".

Según señaló Pelosi, la mayoría de los homosexuales judíos argentinos sufrió alguna forma de exilio a causa de su condición sexual, "a veces fue un exilio interior, íntimo, y otras veces fue fáctico y los obligó a irse a otros países. El exilio era un determinante en un 80 ó 90 por ciento de los casos".

Para modificar esta situación y construir un lugar para los gays dentro de la comunidad, los homosexuales se nuclearon en la asociación Judíos Argentinos Gays (JAG, sigla que como palabra, en hebreo, significa "festividad") desde donde reivindican el orgullo de ser judíos y gays a la vez, y centralizan todas las acciones relacionadas con la aceptación de la homosexualidad.

"Veo una gran ignorancia que se puede subsanar y para ello lo más importante es la educación en los colegios y la tarea de concientización de la gente para que pueda identificarse con lo distinto. Debe haber un trabajo de visibilización y concientización de lo diferente", expresó Pelosi. (Télam).-
 

pap-sa-gel

 

Sin votos (todavía)