En el programa “Tarde para Nada” que conduce la periodista
María O’Donnel, en la FM 89.9 fue entrevistada María del
Carmen Verdú, abogada de la CORREPI (Coordinadora contra
la Represión Policial e Institucional)
El motivo fue para consultarle sobre las nuevas medidas que fueron tomadas
por el Gobierno Nacional a través del Ministerio de Seguridad que conduce
Patricia Bullrich, referidas a la resolución 956/2018 y publicada por medio de
Boletín Oficial, que habilita a la policía a usar armas de fuego sin tener que dar
la voz de alto si su vida o la víctima corre peligro de muerte.
Le preguntaron a Verdú “como se compara esta legislación con lo que pasa en
otros países como Francia, España, Estados Unidos? a lo que la abogada
respondió: ” No se si se puede comparar con el resto del mundo, “pero calculo
que en el Estado de Israel le darán un premio al policía que mate por la
espalda a un palestino, pero no se si tienen el coraje de tenerlo legislado”
Habida cuenta de este comentario, no queda más que repudiar a esta señora
en sus conceptos. En primer lugar por no hacer comparación alguna con las
legislaciones de los países consultados, así como no mencionar que es lo que
ocurre en países donde no existen las mas mínimas libertades personales,
pero si en un claro sentir antisemita emite este comentario. No le pareció
relevante que haya gobiernos que autoricen la lapidación de mujeres por haber
sido violadas, que aplaudan el fusilamiento de personas por ser homosexuales,
que promuevan la tortura de opositores políticos, que fomenten a sus jóvenes y
niños a apuñalar y atropellar a civiles, pero sí se le ocurrió mencionar sin saber
(“calculo”, “no se si tienen”) al estado judío. Más claro su antisemitismo,
imposible.
Solo para que esta mujer se ilustre copio una nota de principios del 2017
relacionada con el accionar de la Justicia en el Estado de Israel.
Independientemente de ello, sería menester por parte de la DAIA citar a la
señora Verdù para que aclare estos conceptos, que no hacen otra cosa que
distorsionar la realidad y generar odio en la comunidad argentina.
“El soldado israelí Elor Azaría, que mató de un tiro a un joven palestino cuando
estaba en el suelo herido tras apuñalar a otro uniformado en Hebrón, fue
condenado hoy por homicidio.
La presidenta del tribunal militar, la jueza Maya Heller, leyó durante cerca de
tres horas una dura sentencia en la que señaló que Azaría sabía que su acción
provocaría la muerte y que mató al atacante palestino -Abdel Fatah al Sharif,
de 20 años-, “sin motivo” que lo justificase el pasado mes de marzo.
En la calle, a las afueras de la sede central del Ejército en Tel Aviv (Kiryá),
cientos de personas se manifestaban contra el proceso, entre gritos contra los
árabes y contra la izquierda israelí, que apoyó la condena del militar.
Tras leerse el veredicto, una familiar del condenado fue expulsada de la sala
después de gritar contra los jueces y afirmar que la sentencia era “una
vergüenza”.”Mañana no habrá Ejército. El Ejército está acabado”, gritó en
referencia al argumento de que las Fuerzas de Defensa han abandonado a su
soldado.
Otro familiar voceó: “asquerosos izquierdistas”, antes de abandonar enfadado
la sala, en una crítica al sector que respalda la condena. .Azaría permaneció en
calma durante y después de la lectura de la sentencia, que fue inusualmente
larga y que los miembros del tribunal aprobaron por unanimidad.
El caso ha provocado gran tensión en la sociedad israelí dividida entre los que
defienden la actitud del soldado frente a lo que consideran el enemigo palestino
y los que creen que lo que hizo fue inmoral y contrario al código militar, que
permite disparar a matar solo cuando haya un grave riesgo para la vida o la
integridad.
El caso de Azaría dio la vuelta al mundo después de que un activista de la
ONG israelí de derechos humanos Betselem, grabara en vídeo las imágenes
en las que se ve al soldado.
Betselem proporciona desde hace una década cámaras a los palestinos en los
puntos de mayor fricción, para documentar los abusos del Ejército y los
colonos..Se espera que en las próximas semanas se fije la pena, que en el
caso de homicidio puede ser de un máximo de veinte años de prisión.”
