No basta la enumeración, no hay respuesta que sirva ni explicación que valga. Hagámonos cargo como hombres libres en un mundo que es sordo o loco o malvado. No lloremos la Biblia junto a un calefón. Al parecer el ridículo no sorprende a nadie, no choca la contradicción. ¡Por favor! no sigamos comprando mentiras a precio de oro.
¡Ah, Discépolo!: “El mundo fue y será una porquería en el 506 y en el 2000 también, que siempre ha habido chorros maquiavelos estafados contentos amargados valores y doblez es lo mismo ser derecho que traidor colchonero rey de bastos caradura polizón ignorante sabio chorro generoso estafador todo es igual, nada es mejor, lo mismo un burro que un gran profesor no hay aplazados ni escalafón. Dale nomás dale que va, que allá en el horno nos vamos a encontrar. Da lo mismo el que labures todo el día como un buey, que el que robes, que el que cures o estés fuera de la ley. ¡Qué falta de respeto, que atropello a la razón!, cualquiera es un señor, cualquiera es un ladrón. Pero que el siglo veinte es un despliegue de maldad insolente ya no hay quien lo niegue, vivimos revolcados en un merengue y en un mismo lodo todos manoseados”
¡Paz! Paz sí, paz con quien quiere la paz, no paz a cualquier precio, no paz a toda costa. No paz con quienes no se arrepienten de nada, con quienes no nos aceptan, no reconocen nuestro derecho a la existencia, no nos toleran, no quieren saber nada con nosotros. Paz entre pacíficos, paz con los que proponen vida, no con los que proponen muerte, no hay paz si prometen destruirte, si prometen matarte, si prometen borrarte del mapa. No sigamos comprando vil basura a precio de oro.
¿Un estado libre de judíos, un judenrein? ¿Un Israel libre de judíos? ¿Seríamos tan locos para pedir un estado árabe sin árabes? ¿Qué esquizofrenia es ésta? La resolución de las naciones unidas fue dividir el territorio en disputa entre un estado judío y un estado árabe. Ni más ni menos. Ni estado judío sin judíos ni estado árabe sin árabes.
No hay respuesta que sirva, basta de enumerar, frente a la locura fundamentalista no hay explicación que valga. En internet circula la pregunta “¿Corresponde a Israel la tierra donde está establecida? ¿Qué pregunta es ésta? ¿Corresponden a Cuba, a Venezuela, a Irán la tierra donde están establecidas? Sólo a Israel se le cuestiona su derecho a la vida, no se le permite vivir tranquilo en la tierra que le pertenece, a ningún otro pueblo, a ningún otro país se le cuestiona públicamente su derecho a la existencia en su territorio soberano.
No se trata de perdonar ni de que nos perdonen. Neguémonos a comprar un periódico que nos vende a precio de oro un ataque mediático insidioso. No compremos mentiras a tan alto precio. No entremos en la confusión que nos proponen las agencias internacionales, los columnistas tendenciosos, gobiernos y organizaciones no gubernamentales comprados o complacientes con el único agresor de la libertad y de los derechos individuales, el declarado y confeso enemigo del pensamiento, del hombre libre, de occidente, usted ya sabe quien es: el agresor islamofascista y su ejército de fundamentalistas locos, asesinos e intolerantes.
Americo Figueroa historiabierta@yahoo.com.ar
