¿DEBERÍA EL 'JUDAÍSMO MUSCULAR' HACER UNA REAPARICIÓN?

Posteado el Vie, 20/01/2023 - 11:55
Autor
Joshua Hoffamn. Traducción por David Salischiker
Fuente
Future of Jewish

"Judaísmo muscular" es un término acuñado por Max Nordau en su discurso en el Segundo Congreso Sionista celebrado en Basilea en 1898.1

Nacido en 1849 en el Reino de Hungría, Nordau fue uno de los fundadores del movimiento sionista moderno, así como filósofo, autor, médico y periodista.

En su discurso de 1898, habló sobre la necesidad de diseñar al "nuevo judío" y rechazar al "viejo judío". Nordau vio el judaísmo muscular como una respuesta a Judennot ("angustia judía").2

Específicamente, describió tres aspectos del "judaísmo muscular", algunos de los cuales son una fortaleza en el mundo judío de hoy, y otros de los cuales todavía tenemos un trabajo serio por hacer.

Estos tres aspectos son:

1) Fuerza física y mental

El "judaísmo muscular" se refiere al cultivo de propiedades mentales y físicas, como la fuerza, la agilidad y la disciplina, que Max Nordau creía que eran necesarias para el renacimiento nacional del pueblo judío.

Parece que estaba en algo, como lo demuestra el movimiento kibutz, en el que los judíos emigraron a Israel a partir de la década de 1800 para construir comunas agrícolas físicamente intensivas, cultivar tierras estériles y trabajar los campos ellos mismos.

También vimos "judaísmo muscular" en la formación de las Fuerzas de Defensa de Israel, hoy en día el mayor ejército libra por libra del mundo, así como en las organizaciones paramilitares anteriores a las FDI (como Bar-Giora, el Nuevo Yishuv, Hashomer y la Haganá) que precedieron a la fundación del Estado de Israel en 1948.

Pero mucho antes del establecimiento del Estado, los líderes judíos europeos prestaron atención a la filosofía de Nordau; entre 1896 y 1936, los atletas judíos ganaron una cantidad desproporcionada de medallas para Austria en los Juegos Olímpicos (en relación con su proporción de la población austriaca total).3

En 1928, Imre Lichtenfeld, nacido en Bratislava, fundador del arte marcial israelí, Krav Maga,  ganó el Campeonato Eslovaco de Lucha Juvenil, y en 1929, el campeonato adulto en las divisiones de peso ligero y medio. Ese año, también ganó el campeonato nacional de boxeo y un campeonato internacional de gimnasia.4

La idea de Nordau del "judaísmo muscular" también inspiró a los fundadores del Hakoah Vienna, un club deportivo vienés especialmente conocido por su equipo de fútbol. Los jugadores decoraron sus uniformes con símbolos judíos, como la Estrella de David, y adoptaron apodos de líderes militares judíos históricos, como Bar Kojba.5

En su apogeo a mediados de la década de 1920, un periodista escribió que Hakoah (hebreo para "la fuerza") era "uno de los mejores equipos del planeta".6

Los Juegos Macabeos ("los Juegos Olímpicos judíos") también podrían haber sido el resultado del "judaísmo muscular", ya que la propuesta inicial se presentó en 1929. Tres años más tarde, los primeros Juegos se inauguraron  en Tel Aviv, con aproximadamente 400 atletas judíos de 18 países que compitieron en natación, fútbol, balonmano y otros deportes.7

Hoy en día, hay una variedad de atletas judíos e israelíes que compiten profesionalmente en todo el mundo en prácticamente todos los deportes, como fútbol americano, béisbol, baloncesto, judo, gimnasia, tenis, pickleball, hockey, lucha libre y MMA.

Haría mucho por la causa judía tener más atletas judíos e israelíes compitiendo en todos los niveles, ya que los elementos intrínsecos de trabajo en equipo y camaradería de los deportes crean importantes lazos sociales entre jugadores judíos y no judíos.

Por ejemplo, cuando el pequeño alero israelí Omri Casspi jugó en la NBA, regularmente recibió a sus compañeros de equipo (no judíos) en Israel durante la temporada baja, lo que les dio la oportunidad de experimentar Israel de primera mano y dejó una marca indeleble, algo que probablemente no habría sucedido de otra manera.

2) Rehabilitar la imagen de los judíos de la diáspora

Max Nordau percibió las características del "judaísmo muscular" como exactamente lo contrario, una antítesis, del judío de la diáspora, especialmente en Europa del Este, como se muestra en la literatura antisemita y en la literatura del movimiento Haskalah (ilustración judía).

En el momento del discurso de Nordau, el judío de la diáspora era a menudo el judío rabínico o haskalah -el hombre de letras, el intelectual- que se decía que estaba ocupado toda su vida involucrándose con temas esotéricos. Su cuerpo y su voluntad se debilitaron. Nordau vio la promoción de judíos musculosos y atléticos como un contrapunto a tales representaciones de los judíos como un pueblo débil.8

No lo olvides: Nordau estaba promoviendo esta mentalidad a finales de 1800, cuando los judíos no eran quienes son hoy, tanto en Israel como en toda la diáspora. Mucho ha cambiado desde entonces, el llamado bueno (la fundación del Estado de Israel), malo (dos poblaciones principales de judíos que parecen estar separándose) y feo (el Holocausto).

En cualquier caso, el "viejo judío" sigue siendo prominente en el mundo judío de hoy, particularmente en la diáspora. Y muchos "viejos judíos" incondicionales dirigen las miles de organizaciones judías en todo el mundo, financiadas con miles de millones de dólares en gran parte por filántropos "viejos judíos", obviamente con el objetivo de influir en tantas comunidades judías y judíos como sea posible.

Desafortunadamente, muchas de estas organizaciones usan tácticas de "viejo judío" para recaudar fondos y dirigir sus organizaciones, propagando en última instancia paradigmas de "viejo judío" como la victimización, la ansiedad y el miedo.

Tal vez un "viejo judío" nunca pueda convertirse completamente en un "nuevo judío", y no estoy seguro de que lo necesiten. De hecho, creo que el judío "musculoso" y el judío rabínico o haskalá no son  mutuamente excluyentes. Hoy en día, creo que son lo que hace a un judío completo: uno que está impulsado intelectualmente y física y mentalmente en forma.

Actualmente, estamos viendo este fenómeno de "viejo judío-nuevo judío" desarrollarse en Israel, con la creciente población nacionalista religiosa. No  estoy de acuerdo con todo  lo que estos nacionalistas religiosos israelíes hacen y dicen, pero tampoco estoy en desacuerdo con todo. Hay algo que decir acerca de combinar lo mejor de los atributos de "viejo judío" y "nuevo judío".

3) Ayudar a prevenir fenómenos antisemitas

Es posible que hayas escuchado el chiste:

Dos judíos entran en un bar...

Uno de ellos, citando a Haaretz, está desesperado, lamentando la última avalancha de ataques contra Israel y un aumento consecuente en la violencia antijudía en ciudades europeas y estadounidenses.

El otro judío, haciendo referencia a la prensa iraní, está encantado con las historias del poder judío, mientras lee en voz alta que los sionistas controlan Washington, Wall Street, Hollywood, los mercados financieros globales y los medios de comunicación.

¡Hah! Si tan solo fuéramos tan poderosos.

Esta broma, de alguna manera, en la diferencia entre el "viejo judío" (que cita Haaretz) y el "nuevo judío" (que hace referencia a la prensa iraní). Este último es típicamente el judío israelí: orgulloso, directo, descarado, optimista, tambaleándose entre confiado y arrogante, a veces incluso desagradable.

Por supuesto, es fácil para un judío ser orgulloso, directo, descarado, optimista, confiado, etc. cuando vives en un país judío, gracias a sus fronteras intensamente seguras y defensa de clase mundial (militar, inteligencia, etc.). Pero ese es exactamente el punto: el Estado de Israel es la forma más efectiva  de prevenir los fenómenos antisemitas.

Diablos, incluso el Mossad tiene departamentos cuyo trabajo es cuidar a los judíos de todo el mundo, incluso si estos judíos no viven en Israel, e incluso si no son ciudadanos israelíes. Piensen en eso por un segundo.

Sin embargo, cada vez más judíos en todo el mundo se están volviendo cada vez más exigentes y exigentes con su relación con Israel (o la falta de ella). Para mí, un judío que no apoya al Estado de Israel  es tan malo como una persona que es antisemita. (Observe cómo escribí el Estado de Israel y no el gobierno de Israel, o los políticos de Israel.)

No estoy diciendo que los judíos deban apoyar incondicionalmente al Estado de Israel sin importar lo que el gobierno o ciertos políticos hagan o digan. Pero no lo olvide: el gobierno está dirigido por ciudadanos comunes y corrientes, y los políticos son elegidos democráticamente.

Esto significa que cualquier judío puede mudarse a Israel, convertirse inmediatamente en ciudadano israelí de acuerdo con la Ley del Retorno, y participar en el gobierno y la política si así lo desea. Entonces, si los judíos de la diáspora están tan desaliñados por el gobierno de Israel o sus políticos, literalmente pueden ser el cambio que quieren ver. ¿Cuántos otros países ofrecen esa oportunidad?

Por supuesto, estoy siendo extremo aquí. La mayoría de los judíos de la diáspora no harán lo que describí en el párrafo anterior, ni debemos esperar que lo hagan.

Hablando de manera realista, hay un enfoque mucho más equilibrado y fundamentado: los judíos de la diáspora deberían mejorar y mejorar continuamente su relación con Israel, e Israel debería hacer lo mismo con ellos. Es una calle de doble sentido, y cuanto más se involucren los judíos de la diáspora con Israel, más Israel (tanto el gobierno como los israelíes comunes) se comprometerán con ellos.

Esta relación es esencial, porque cuanto más fuertes y unificados  sean colectivamente los judíos israelíes y de la diáspora,  más antisemitismo se volverá impotente y más  prosperará el pueblo judío de  hoy y de las generaciones futuras.

Fin.

1

"Judaísmo muscular". Wikipedia. https://en.wikipedia.org/wiki/Muscular_Judaism

2

Foer, Franklin. "Cómo el fútbol explica el mundo: una teoría improbable de la globalización". Nueva York: HarperCollins. pág. 68. 2004.

3

Foer, Franklin. "Cómo el fútbol explica el mundo: una teoría improbable de la globalización". Nueva York: HarperCollins. pág. 70. 2004.

4

"Bio Imi Lichtenfeld| Federación Europea de Krav-Magá." www.krav-maga.net

5

Foer, Franklin. "Cómo el fútbol explica el mundo: una teoría improbable de la globalización". Nueva York: HarperCollins. pág. 68. 2004.

6

Foer, Franklin. "Cómo el fútbol explica el mundo: una teoría improbable de la globalización". Nueva York: HarperCollins. pág. 66. 2004.

7

Mendelsohn, Esdras. "Los judíos y la vida deportiva: estudios en la judería contemporánea XXIII". Oxford University Press. 31 de marzo de 2009.

8

Zimmermann, Moshe. "Judíos musculosos versus judíos nerviosos". En Brenner, Michael; Reuveni, Gideon (eds.). Emancipación a través de las musculas: judíos y deportes en Europa. Lincoln, NE: Prensa de la Universidad de Nebraska. pág. 13. 2006.

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